¿Cómo activar una conversación con nuestro Dios todopoderoso? ¿Cómo podemos palpar la presencia de Dios para asegurar que es real? ¿Cómo interpretar las señales de Dios y de qué manera se pueden manifestar?
Como ser humano, eres impotente e incapaz de salvarte a ti mismo, pero mediante la palabra de Cristo puedes sentirte un ser querido y seguro.
Los seres humanos se relacionan por naturaleza. Nuestro padre desea mantener relaciones personales con nosotros. Dios es omnipotente y omnipresente, pero también es personal. Dios es consciente, presente y está involucrado compasivamente con cada detalle de nuestra identidadad. Dios demanda que nos desarrollemos en la misma versión de nosotros mismos para acceder a Él. Dios está aquí. Dios nos escucha cuando hablamos y se mantiene fiel a su promesa de mantenerse siempre cerca de nosotros para amarnos y respetarnos.
¿Hablar con Dios es igual que rezar?
Orar combina la adoración con la manera en la que expresamos nuestra fe. Podemos apelar a la atención de Dios mediante una oración religiosa, pensamientos plasmados en un diario, momentos sagrados y en silencio con Dios, canciones… El mensaje hacia nuestro Padre creador está en el contenido de la conversación, más que en el formato de entrega.
Dios se maifiesta de manera invisible pero omnipresente. Es posible hablar con Dios desde cualqiuer lugar, en cualquier momento. Es entonces cuando el don de la salvación flexiona su músculo más hipertrofiado: el Espíritu Santo.
¿Dios puede hablar en sueños?
Dios puede hacerlo todo. Dios puede hablar contigo en sueños. Como creador, Padre y Dios omnipotente y soberano, Dios puede reflejar su poder en nuestros sueños.
Como cuando rezamos el Santo Rosario, los sueños son simples visiones nocturnas y pueden ser un canal que Dios use para comunicarse con nosotros. Dios habla, de una forma en otra, aunque nadie lo perciba. En un sueño profundo, Dios puede hablar al oído y revelarte las avertencias que te ayuden a actuar correctamente para preservar tu vida de los peligros.
8 pasos para mantener una comunicación fluida con Dios
Comienza por pensar sobre qué quieres conversar
Reflexiona sobre qué quieres hablar con Dios. Cuál es el motivo principal que te lleva a iniciar una conversación mediante la plegaria con Él.
Ordena los temas que más te interesa tratar con Dios
Dios desea escuchar lo que tienes que decir, pero es importante que antes tú sepas qué es lo que quieres contar.
Trata a Dios con la misma honestidad que te trata él
Dios y honestidad son sinónimos. Dios espera que te dirijas a Él en tu forma más pura, sin adulterar. Muéstrale tus sentimientos y emociones tal y como se presentan.
Agradece a Dios todo lo maravilloso que ya ha hecho por ti
El agradecimiento es una oportunidad para abrir las puertas de las cosas buenas a tu vida.
Relájate en nombre de Jesús sabiendo que Dios comprendió todo lo que tu alma y corazón han sentido
Dios siempre oye tus plegarias.
Comparte con tus seres queridos todo lo que has sentido mientras rezabas por ellos
Tu familia y amigos son grandes aliados cuando ellos también rezan y oran por ti.
Recuerda que Dios lo sabe, lo ve y lo hace todo
Dios te acompaña desde que naces hasta que mueres. Él siempre está contigo.
Sigue orando para disfrutar de los beneficios de rezar y de la fe que profesas
Que lo que yo pronuncie alcance a muchas vidas y que sus corazones las digieran y consuelen internamente hasta que comience el fuego en sus almas para Jesucristo. En nombre de Jesús, yo oro. Amén.