¿Te emociona la idea de empezar o extender tu familia? ¿Quieres preparar tu cuerpo y tu mente antes de quedar embarazada? ¿Cuáles son los pasos de preparación preconcepcional para maximizar tus oportunidades de disfrutar de un embarazo saludable y feliz?
Es obvio: Para aumentar tus oportunidades de quedar embarazada, es necesario mezclar con mayor frecuencia tus óvulos fértiles con el esperma de tu pareja.
Más del 80% de las parejas donde la mujer tiene menos de 35 años suelen concebir un hijo en el siguiente año de empezar a mantener relaciones íntimas habituales sin usar anticonceptivos.
Más del 90% de las parejas quedan embarazadas en los próximos 2 años.
Cuando hablamos de relaciones íntimas habituales, queremos decir mantener relaciones cada 2 a 3 días sin utilizar protección.
Ten en cuenta que es crucial que las relaciones que mantengas con tu pareja tienen que ser placenteras para ambas. Concéntrate en esto en lugar de en concebir es útil para eliminar el estrés.
Pero… ¿qué más puedes hacer? Estas son las 10 cosas que te pueden ayudar a quedar embarazada:
Programa una revisión de preconcepción con tu obstetricia/ginecólogo
Una revisión médica que asegure que te encuentras en perfecto estado de salud te ayudará a comprender qué necesitas hacer para quedar embarazada.
Una revisión de preconcepción es especialmente recordable si:
- Es tu primer embarazo.
- Tienes más de 35 años y estás intentando tener un hijo.
- No consigues quedar embarazada después de 12 meses sin utilizar protección.
- Padeces problemas endocrinos o de salud que puedan interferir en tu fertilidad.
Solamente un doctor puede arrojar luz a cualquier problema de salud y será tu guía en todo lo relacionado con la ovulación y cómo quedar embarazada, siempre de manera saludable y segura para tu organismo.
Toma suplementos prenatales
Tu cuerpo tiene que estar en perfectas condiciones antes de quedar embarazada. Esto se consigue aprendiendo a mantener una dieta saludable y tomando suplementos prenatales.
Generalmente, estos suplementos se componen de ácido fólico y otras vitaminas y necesarias que facilitan una concepción saludable. Tu médico te puede prescribir cualquier suplemento que sea adecuado que ayuden a garantizar un desarrollo saludable del feto y del embarazo.
Conoce el historial médico de tu familia
Investigar tu historial médico familiar es una de las prioridades previas a quedar embarazada. Puedes hablar con tus familiares más cercanos para consultar posibles enfermedades genéticas o crónicas que hayan padecido tus antecesores.
Puedes preguntar a las mujeres de tu familia si ellas tuvieron algún tipo de complicación al concebir. Conoce cómo fueron sus embarazos y sométete a las pruebas médicas pertinentes para tratar de detectar cualquier enfermedad genética y descartar que algo esté afectando a tu fertilidad.
Considera una revisión de tu salud dental
Una visita suele ser una de las primeras cosas que las mujeres hacen cuando piensan en tener un hijo.
La razón es que cuando quedas embarazada, tus encías tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades.
Una revisión dental y una limpieza profesional es un paso casi obligatorio para evitar riesgos durante el embarazo. Mantener buenos hábitos de higiene dental reduce las probabilidades de complicaciones durante la gestación.
Deja los anticonceptivos
Esto es fácil con algunos anticonceptivos, pero ciertas formas para el control de la natalidad, como el DIU, se suelen utilizar durante largos plazos de tiempo, por lo que tendrás que hablar con tu médico al respecto.
Tu profesional de la salud te dará indicaciones precisas sobre cómo finalizar tu tratamiento anticonceptivo. Es posible que tu cuerpo perciba cambios hormonales tras interrumpir el control de la natalidad y en algunos casos la fertilidad puede volver en semanas o meses. No obstante, toma nota: si notas algo raro, contacta de inmediato con tu médico.
Vacúnate
Las vacunas ayudan a prevenir muchas de las enfermedades que pueden suponer un enorme riesgo para el feto.
Es normal hablar con tu médico, familia o realizar un análisis de sangre te ayudará a saber si tus vacunas están al día y por lo tanto, tu organismo se encuentra inmunizad frente a enfermedades como el sarampión, la varicela o las paperas. Las vacunas adecuadas también te protegerían de la gripe y alguanas cepas del VPH.
Mantente lejos de las toxinas
Mantenerse alejada de las toxinas significa dejar los cigarrillos, dejar de beber alcohol y superar cualquier adicción las drogas. Algunas toxinas ya sabes que pueden ser altamente perjudiciales para tu bebé, pero hay otras, como la vitamina A, que quizá no conocías.
Los pesticidas y otros productos químicos también suponen un riesgo potencial. Lo mismo ocurre con los productos lácteos sin pasteurizar.
Necesitas consultar a tu médico cualquier inquietud que tengas al respecto.
Establece tu presupuesto
El primer trimestre del embarazo suele ser el más agotador para muchas mujeres, pero un presupuesto por adelantado te dará la tranquilidad y te permitirá hacer ajustes que te permitan cubrir completamente a tu familia.
Normalmente, empezarás a necesitar hacer algunas compras entre las semanas 9 y 10 del embarazo, por eso es aconsejable que empieces a ahorrar desde ya para poder responder a las posibles emergencias asociadas a la concepción y el embarazo
Asegúrate de comer el pescado adecuado
Cuando decides quedar embarazada también necesitas saber qué tipos de mariscos son adecuados para comer durante estás embarazada y cuáles no.
Algunos pescados, como el pez espada, la caballa, deben ser eliminados de tu dieta. Otros, como el atún y el salmón necesitan reducir su consumo.
El mercurio puede causar defectos de nacimiento, por lo que ten cuidado de consumirlo sin darte cuenta.
Pero, ¡ojo! no tienes que eliminar el pescado por completo de tu dieta: los ácidos grasos omega-3 que proporcionan el pescados son saludables siempre que se come según lo recomendado.
Haz los ejercicios de Kegels
Si todavía no lo has hecho, siempre es buen momento para empezar a hacer ejercicios de Kegels antes de quedar embarazada.
Hacer los ejercicios de Kegels regularmente y mucho antes del parto es fácil y efectivo. Además, puedes realizarlos en cualquier sitio.
Puedes programar una alarma para recordarte hacer estos ejercicios cada día y consulta con tu médico maneras de fortalecer todavía más las paredes de tu vagina.
En la actualidad existe abundante información disponible sobre el embarazo, por lo que es sencillo mantener al tanto de cómo prepararse. Estarás facilitando todo el proceso si aprovechas el tiempo de preconcepción para informarte de todo lo que tienes que hacer antes de quedar embarazada.