¿Cómo limpiar el suelo para obtener resultados increíbles sin deteriorarlo? ¿Qué trucos existen para obtener la máxima limpieza y un aspecto como el del primer día en nuestros suelos? ¿Existe algún método para mantener nuestro suelo limpio por más tiempo sin que eso tenga que significar limpiar más?
No hay duda no todos los suelos son iguales.
Aunque eso está claro, lo que mucha gente todavía no sabe es que cada tipo de material requiere de unos cuidados especiales.
Tanto si tu suelo es de madera, como si es de piedra o porcelana, conocer cómo limpiar y qué tipo de mantenimiento requieren, es un requisito indispensable si lo que buscas es disponer de un suelo bonito y brillante durante más tiempo.
Cómo limpiar suelo laminado
Es posible que tu suelo laminado tenga aspecto de tablas duras de madera o de baldosas de piedra natural. No obstante, esto es solo su apariencia, y siempre tendremos que darle los cuidados de un suelo laminado para mantenerlo en perfecto estado.
Aunque existen pocas cosas que puedan dañar este tipo de suelos, ya que al estar fabricados con capaz que ofrecen resistencia al sol y a la luz, la verdad es que podremos disfrutar de un aspecto extraordinario en nuestros suelos durante mucho más tiempo todavía, si aplicamos correctamente algunas recomendaciones básicas para su limpieza.
Por ejemplo, tendremos que evitar, en la medida de lo posible, las ocasionales filtraciones de agua que puedan acceder bajo los tablones. Es mejor pasar un aspirador o limpiar evitando los excesos de agua. Puedes probar a quitar las manchas con un trapo húmedo.
También es importante que sepa algo más, y es que este tipo de suelos no se pueden pulir, de tal modo que, si tu suelo está muy dañado, la mejor opción es que lo cambies.
Cómo limpiar suelos de porcelana
Puedes mezclar un poco de vinagre en una botella, con un poco de detergente y agua templada que te ayudarán a desincrustar de manera rápida y eficaz hasta el último rastro de suciedad.
Termina con la mopa húmeda o con la fregona y no dudes en emplear una vaporeta para llevar la limpieza de tus suelos de porcelana a un nivel superior.
Cómo limpiar suelos de madera
Los suelos de madera suelen disponer de dos tipos de acabado: poliuretano o cera. Sin embargo, es posible que no sepas bien de cuál dispone el tuyo. Podrás comprobar que se trata de encerado, si al pasar el dedo sobre él aparece una mancha.
Los suelos de madera sellados suelen venir con un revestimiento de uretano, poliuretano o de poliacrílico. Mediante esto se pretende preservar el suelo durante mást iempo de manchas y daños externos.
Un gran método para limpiar suelos de madera para interior y exterior y conseguir un máximo resultado, consiste en añadir un poco de jabón con pH neutro a un poco de agua y, con ayuda de una mopa o fregona, limpia toda la superficie para dejarla reluciente. Tan solo asegúrate de no dejarlo demasiado húmedo, y procede a su limpieza una vez a la semana, si es una zona muy transitada, y una vez al mes si es un área que no lo es.
La humedad afecta gravemente a los suelos de madera encerada, por lo que, en este caso, el mejor consejo es evitar el agua y usar un cepillo para barrer, o el aspirador para eliminar cualquier rastro de polvo o suciedad.
Aunque el acabado de tu limpieza depende de la calidad de tu suelo, también es posible conseguir un buen suelo si siguies los pasos correctos.
Cómo limpiar suelos de bambú
Dado que el bambú es un material sostenible, de gran belleza y que suele ser más delicado que los suelos de madera, es necesario darle unos cuidados más especiales que nos garanticen su durabilidad durante mucho tiempo.
A no ser que tu suelos ea de bambú trenzado, que s trata del suelo más resistenet de bambú que existe, lo mejor es barrerlo con cuidado para evitar que la suciedad permanezca mucho tiempo sobre él.
Puedes usar la misma mezcla que para limpiar suelos de madera, de tal modo que añadiendo un poco de jabón con pH neutro a un cubo con agua, podremos limpiar nuestro suelo, siempre y cuando, después eliminemos cualquier exceso de humedad.
Cómo limpiar suelos de piedra natural
Es muy importante que sepas que este tipo de suelos se ven seriamente deteriorados por el vinagre, tal como pasa con la lejía y con el amoníaco.
Para limpiar suelos de piedra natural, lo mejor es aplicar un limpiador de pH neutro que no actúe sobre el suelo de piedra de manera negativa. Si la suciedad está muy incrustada, opta por una limpieza a vapor.
Cómo limpiar suelo de corcho
Este suelo es tan bonito como poroso, lo cual hace que sea proclive a sufrir daños por el exceso ed humedad.
Se trata de un tipo de suelo altamente absorvente, y aunque la mayoría de suelos de corcho están sellados, nunca viene de más tomar algo de precaución para mantenerlo perfecto durante más tiempo.
Usar el aspirador con delicadeza, para evitar daños, o limpiar los líquidos tan pronto como se derrame algo sobre ellos nos ayudará a evitar posibles deterioros potenciales.
En cuanto a qué productos podemos utilizar para limpiar los suelos de corcho, encontramos una solución milagrosa. Tan solo mezcla un poco de vinagre con una gota de jabón y pulverízalo sin agitar sobre tu suelo. Esto no solo ayuda a descomponer la sociedad, sino que evita acumulaciones y ayuda a desinfectar. Luego termina con una mopa húmeda o una fregona sobre la zona que estabas limpiando.
Cómo limpiar suelo de vinilo
Puedes limpiarlo una vez a la semana mezclando un poco de vinagre con una gota de detergente y agua tibia. Aplícalo sobre la suceidad del suelo y termina pasando la mopa húmeda para maximizar los resultados.
Si quieres una limpieza más integral, puedes usar un limpiador a vapor para limpiar baldosas, ya que este es útil para eliminar manchas y aniquilar bacterias.
Cómo limpiar suelos de linóleo
El linóleo auténtico se favbrica con aceite de linaza, resina, piedra caliza, fibra de madera y polvo de corcho. Además, se suele colorear con pigmentos minerales que le otorgan ese aspecto tan bello y hermoso.
Puedes aplicar los mismos métodos que para limpiar el suelo de corcho, de tal modo que mezclando en una botella pulverizadora un poco de detergente con agua caliente, podremos rociarlo para que nuestro suelo quede impecable. Aunque puedes dejarlo secar al aire libre, si lo notas algo pegajoso, tan solo pasa una mopa húmeda para solucionarlo.