¿Te interesa mantener unos huesos fuertes y sanos durante el mayor tiempo posible? ¿Es cierto que hay algo que podamos hacer para proteger nuestro sistema óseo desde este momento? ¿Cuáles son las claves para que nuestros huesos permanezcan en buen estado sin tener que cambiar por completo nuestro estilo de vida?
Cuidar y proteger nuestros huesos es una tarea que debemos hacer todos sin importar nuestra edad.
Mantener una dieta sana, hacer ejercicio frecuente o evitar conductas de riesgo son tan solo algunos de los pasos que debemos seguir para mantener una salud ósea de hierro.
No obstante, el cuerpo, las hormonas y los estilos de vida pueden cambiar, por eso es importante que conozcas algunas de las claves que te ayudarán a mantener un sistema óseo resistente, sano y muy duradero.
Reunimos y compartimos contigo lo que debes hacer para asegurarte de que los 206 huesos de tu cuerpo se mantienen en buen estado a lo largo de toda tu vida.
8 sencillas maneras de empezar a proteger tus huesos hoy mismo
Come equilibrado
Comiendo frutas, verduras y estando alerta para reducir los productos grasos es una manera extraordinaria para empezar a proteger los huesos.
El calcio y la vitamina D que ingerimos mediante los alimentos nos ayuda a mantener los huesos en estado óptimo.
Elimina el azúcar
El azúcar es conocido por apropiarse de los minerales del cuerpo, como el calcio o el magnesio.
Si quieres evitar el déficit de calcio o magnesio en tu organismo, entonces puedes empezar por evitar el azúcar en la medida que te sea posible.
Ya existen sustitutos, como edulcorantes, que puedes empezar a utilizar que se postulan como alternativas mucho más sanas y menos perjudiciales.
Asegúrate de tomar suficiente magnesio
El magnesio es uno de los minerales principales del cuerpo humano, aunque mucha gente llega a tener deficiencia de este mineral.
Puedes encontrar suplementos que te ayudarán a suplir esta carencia de magnesio de manera rápida y sencilla.
Toma mantequilla
Sobre todo, la mantequilla orgánica resulta muy útil para el desarrollo de neuronas y huesos, tanto en niños como en adultos.
Consumiendo mantequilla conseguirás el calcio y la vitamina D que tus huesos necesitan para mantenerse extra resistentes.
Haz ejercicio
El ejercicio es una fuente inagotable de beneficios para nuestro cuerpo, entre los que se encuentra la capacidad de reforzar nuestros músculos y huesos como nada podría hacerlo de la misma manera.
¡Cuidado con la sal!
Una dieta alta en sodio se asocia directamente con excesos en la excreción de calcio, por lo que tan solo reduciendo la cantidad consumida conseguiremos evitarlo.
Consume menos proteínas
Las dietas ricas en proteínas pueden tener un efecto diurético y afectar a la acidez de la sangre, provocando la pérdida de calcio y magnesio.
Recuerda siempre la regla del 20/80, donde el 20 % de tu dieta deben ser proteínas y el 80 % frutas y verduras.
Deja de fumar
Se ha demostrado que, en comparación con los no fumadores, las personas adictas a los cigarrillos suelen tener una densidad ósea mucho menor que el resto.