¿Qué ha hecho toda esa gente que vemos en el gimnasio para conseguir un cuerpo 10? ¿Realmente es necesario realizar un gran sacrificio de intenso entrenamiento físico durante horas y controlar cada aspecto de nuestra dieta para lograr un buen equilibrio de fuerza, volumen y definición corporal? ¿Cuál es de verdad el secreto para tonificar realmente nuestro cuerpo para alguien que no es profesional ni sabe demasiado de deporte?
Conseguir el cuerpo que deseamos o mejorar nuestra capacidad física es algo con lo que nos comprometemos con nosotros mismos para mejorar nuestra salud y bienestar y sentirnos mejor con nosotros mismos.
Muchas personas van diariamente al gimnasio a no sólo para mejorar su aspecto, sino que también para tener una mejor calidad de vida consiguiendo un cuerpo más delgado, más sano y ejercitado.
El gimnasio es el templo donde se trabaja la resistencia, la fuerza y la voluntad de superación mediante el esfuerzo físico, de manera que debemos estar al 100% concienciados de cuál es nuestro objetivo para obtener resultados efectivos y reales en el menor lapso de tiempo posible.
Por desgracia no existe la fórmula mágica que nos ayude a conseguir estos objetivos. Los resultados dependerán de nuestra constancia, de la manera de entrenar y de cómo realicemos los entrenamientos. Sin embargo, aún hay algo que puedes hacer para acelerar tu progreso de transformación de manera definitiva, de forma que ir al gimnasio se convierta en una auténtica motivación y los beneficios lleguen cuanto antes a tu vida.
6 hábitos para altamente recomendables progresar inmediatamente en el gimnasio
Por lo tanto si quieres saber cómo mejorar en el gimnasio, te dejamos una serie de herramientas para que alcances las metas que te propongas y consigas por fin el cuerpo que deseas.
1. Fuera el teléfono móvil
Es muy habitual ver en el gimnasio gente con el móvil, en la bicicleta estática usando Facebook, WhatsApp o revisando Instagram. Recuerda que estás en un lugar para centrarte en ti y en tu cuerpo, por lo que deja el móvil en la taquilla. Si estás concentrado en el ejercicio conseguirás el doble de resultados y estarás dedicando el esfuerzo que requiere la ejecución.
2. Varía la rutina para no estancarte
El cuerpo humano posee una impresionante capacidad de adaptación. Toda rutina pierde su eficacia al cabo de tres o cuatro semanas. Esto nos indica que ha llegado el momento de cambiarlas. Cambia los ejercicios, si has estado utilizando mucho peso, redúcelo y realiza más repeticiones, y al revés. Cambia el tiempo de descanso entre series y prueba nuevas modalidades o complementos de los ejercicios de siempre.
3. Importancia de las proteínas
En general, se recomienda ingerir tres gramos de proteínas por kilo de peso corporal. Así que incluye alimentos proteicos en tu dieta. Si cocinas en casa, sustituye la harina de trigo por la de soja o de avena para elevar el porcentaje de proteínas y reducir el de carbohidratos. También es importante que incluyas los carbohidratos, ya que son la principal fuente de energía de nuestro organismo. Apuesta por carbohidratos complejos como arroz integral o legumbres, ya que tardan más tiempo en absorberse y ayudan a mantener estables los niveles de glucosa.
4. En el equilibrio está la clave
Una velocidad controlada a la hora de realizar los ejercicios físicos nos ayudará a mantener durante más tiempo el músculo en tensión, con lo que conseguiremos mejores resultados, pues pondremos a trabajar a las fibras de manera mucho más intensiva. La carga por ello debe ser la adecuada, y para ello debemos tener presente que es necesario que concentremos al máximo en el músculo trabajado. Esta manera de entrenar es mucho más importante que ir deprisa y no conseguir concentrar la tensión del ejercicio en el músculo, ya que por norma general lo que sucederá es que parte de esta tensión irá a parar a otros músculos adyacentes.
5. No te machaques demasiado
No porque sufras más significa que vayas a conseguir más pronto el abdomen plano que tanto deseas. Es importante que sepamos escuchar a nuestro cuerpo, y para ello no debemos utilizar cargas demasiado elevadas, ni realizar ejercicios interminables que representen un sobrentrenamiento para nuestros músculos. Recuerda que el descanso también forma parte del entrenamiento. Es más importante descansar y rendir más en el ejercicio que ir cansado y no realizar un ejercicio efectivo.
6. Busca compañía (si la necesitas)
El entrenamiento acompañado es una forma ideal de mantener la constancia y motivarse. Un compañero que te anime y te ayude a levantar peso será excelente para tu entrenamiento, además de resultarte más ameno y divertido.