¿Has oído hablar de la risoterapia y quieres tener 100 % claro lo que significa? ¿Qué es la terapia con humor y cómo practicarla? ¿Cuáles son los beneficios y por qué merece tanto la pena esforzarse por reír un poco más?
Todos lo tenemos: el don de la risa. La risa es la medicina natural. Lo que hace que nuestras almas crezcan y se sientan en armonía. Es una emoción recurrente y contagiosa. Sirve para unirnos, para sentirnos poderosos y, en definitiva, vivos.
La risoterapia, también llamada humorterapia, hace uso del humor para promover la salud y el bienestar general. ¿El objetivo? Utilizar el proceso fisiológico natural de la risa para aliviar el malestar, tal como el estrés físico o emocional.
La risoterapia es una modalidad ideada para promover el bienestar mediante el movimiento de la fuerza de la risa para crear y mantener las energías positivas para el cuerpo, la mente y el espíritu.
Hoy aprenderás como beneficiarte de la práctica de la risoterapia de manera y fiable, mediante la risa, la alegría y las conexiones humanas para desarrollar una actitud más resistente y positiva ante la vida. Un enfoque codificado y muy sencillo de implementar.
¿Por qué practicar risoterapia?
¡Cada vez son más las personas que se están aprovechando de los beneficios de la terapia con risa!
No solo por sus efectos sociales, sino también por su gran valor terapéutico, el humor se ha utilizado desde hace muchos años como un componente esencial de la medicina.
La práctica del humor ya era empleada por cirujanos del siglo XIII para distraer. Apenas dos siglos más tarde, los efectos de la risa sobre el bienestar físico empezó a ser considerada una auténtica ciencia.
Pero la cosa no quedó ahí, pues durante largos años, los investigadores se han esforzado por conocer el impacto del humor en el estado de salud. Los resultados son claros: tras evaluar a los participantes antes y después de un suceso humorístico -como un vídeo gracioso-, el dolor se reducía al disminuir las hormonas relacionadas con el estrés y al estimular el sistema inmunológico de los voluntarios.
A día de hoy, el humor sigue siendo un pilar fundamental en la curación y recuperación de muchos pacientes.
Las terapias basadas en el humor ayudan a mejorar la calidad de vida de pacientes con enfermedades crónicas, por eso muchos centros de salud ahora incluyen la risoterapia como un tratamiento complementario para muchas enfermedades.
¿Cómo actúa la risoterapia?
Muchas enfermedades serias hacen difícil encontrar el humor. No obstante, la risa es una de las mejores formas de sobrellevarlas, aunque muchas personas sigan sin darse cuenta.
La risa es un ingrediente mágico para sentirse mejor contigo mismo y con ls demás. Es una diversión natural que invade tu mente y que produce cambios a todos los niveles.
Ríes un rato y te sientes bien durante todo el día.
De aquí, que tenga tanta importancia como complemento ideal para los tratamientos médicos convencionales, ya que puede acelerar el proceso de curación general.
Entre los beneficios de la risoterapia, se encuentra que:
- Mejora la ingesta de oxígeno.
- Estimula el corazón y los pulmones.
- Relaja los músculos de todo el cuerpo.
- Desencadenar la liberación de endocrinas, que son los analgésicos naturales del cuerpo.
- Calma el dolor.
- Equilibra la presión arterial.
- Mejora las funciones mentales: alerta, memoria y creatividad.
Pero, además, las terapias de la risa y el humor, son útiles para:
- Mejorar la actitud general hacia el día a día.
- Vivir con menos tensión y estrés.
- Facilitar la relajación, el sueño y la calidad de vida.
- Fortalecer vínculos sociales y las relaciones.
- En definitiva: produce una gran sensación general de bienestar.
¿Cómo utilizar la risoterapia de manera segura?
- Sigue a tu corazón, peor guíate por la mente. Si padeces alguna afección médica, siempre recibe el visto bueno de tu médico antes de empezar cualquier tipo de terapia complementaria. Si ignoras esto, lo estarás haciendo bajo tu propio riesgo.
- Disfruta de cada cosa que decidas hacer. Cada uno tiene sus propios límites, por lo que puedes empezar con una sonrisa o reír tanto como puedas.
- ¡No más dolor! Evita los extremos y deja de hacer cualquier cosa que te hace sentir incómodamente o con dolor. Si tienes dudas, pregunta en tu centro de salud.
- Si ríes más, necesitas beber más agua. Reír deshidrata. Aunque no mucho, lo suficiente como para beber más agua si sientes dolor de cabeza después de reír, pues podría ser un signo de deshidratación.
¿Cómo practicar risoterapia?
Decide reir
Puedes sentirte un poco extraño al principio, peor tienes que tener claro que se trata de un ejercicio y no de una comedia. Solo ríe cuando quieres, porque siempre puedes. No juzgues la calidad de tu risa, y aléjate de la idea equivocada de que la diversión es algo frívolo. Cualquier cosa es buena para empezar. Tan solo busca algo que te motive o que te relaje y déjate llevar: puedes empezar por ver una película de comedia, mirar algún monólogo del Club de la Comedia o aprender algunos chistes cortos graciosos para compartir con tu familia y amigos.
Siempre hay motivo de alegría.
La risoterapia es una terapia seria, pero no demasiado. ¡Juega con ella! Una vez aprendas a jugar, ya no tendrás que practicarla. La risa se convertirá en un resultado natural de tus comportamientos amables y gentiles.
Cree que puedes hacerlo
Debes enfocar esta actividad con una mentalidad abierta. Cree que de verdad funciona (porque lo hace). Simula un sincero entusiasmo. Si lo haces con la suficiente pasión, al final todo será mucho más natural.
Practica, se paciente y persevera
Si practicas risoterapia de manera habitual, podrás beneficiarte de la mayoría de sus beneficios. Tu cerebro desarrollará nuevos circuitos y el conocimiento de que siempre puedes elegir reír para convertirlo como una parte de tu mente inconsciente.
Respeta a la gente que te rodea
Reír no es para todos. Ten tacto y respeta a la gente que se pueda sentir molesta. Intenta adaptarte a las circunstancias del lugar y la compañía con la que te encuentras, y nunca intentes coerciones a alguien para reír contigo. El primer paso para cambiar a los demás, es cambiarte a ti primero para ser el ejemplo de lo que te gustaría ver en otros.
Comprometerse con reír es un buen comienzo, pero no es suficiente
Para vivir una vida más rica con todo el bienestar que ofrece la terapia con humor, necesitas adoptar conductas y actitudes que eviten que escape toda la energía positiva que te proporciona reír.
Reír solo es bueno. Reír con otros es aún mejor
Aunque todos los ejercicios de la risoterapia se pueden practicar en solitario, los beneficios se multiplican si lo haces con otros. Reúnete con aquellas personas mas afines a ti y elige sentirte bien junto a ellos Las interacciones sociales que ocurren durante la práctica terapéutica de a risa, lejos de los juicios, tiene muchos más beneficios que la risa en sí.