¿Acabas de comprar una sartén antiadherente y quieres aprender a cuidarla correctamente? ¿Cómo puedes limpiar una sartén antiadherente para que te dure el máximo de tiempo posible? ¿Cuáles son las mejores recomendaciones para preservar este tipo de utensilios?
El equipo y los utensilios de cocina antiadherentes son una gran inversión que nos ayudan ahorrar aceite extra, pero ¿estás cuidando tus sartenes antiadherentes de forma que ayude a resistir el paso del tiempo?
La vida útil típica de estas herramientas suele ser de cinco años, pero con algunas recomendaciones quizá puedan durar más.
Evita el lavavajillas
Es algo difícil volver a lavar a mano, pero la realidad es que tan solo requiere de unos segundos después de preparar la comida.
Lee cuidadosamente las instrucciones del fabricante, ya que las sartenes antiadherentes pueden estar hechas de diferentes materiales (cerámica, teflón, titanio, acero inoxidable, aluminio, etc.), pero lo mejor es evitar el lavavajillas en cualquier caso para aumentar su durabilidad.
Incluso aunque indique claramente que es compatible para lavavajillas, las temperaturas calientes y los detergentes agresivos pueden afectar a la superficie.
Limpia inmediatamente con agua caliente y jabón
Es fácil de entender: si limpia tus artes cuanto antes, la mayoría de desechos se desprenderán fácilmente. La calidad antiadherente evita que se adhiera la mayoría de los alimentos, pero también hace que los residuos lo hagan, si los limpias de inmediato.
Utiliza un jabón suave para la grasa, lavando el interior y el exterior de la sartén con ayuda de un paño de microficha.
Evita los utensilios metálicos
Los utensilios de metal e incluso los estropajos de plástico también pueden afectar al revestimiento de tu sartén.
Es una regla importante evitar utilizar cualquier cosa metálica sobre las superficies antiadherentes.
Utiliza bicarbonato de sodio para retirar la suciedad
Como alternativa a los limpiadores tradicionales que pueden contener ácidos corrosivos, puedes probar una opción totalmente natural. Consiste en mezclar bicarbonato de sodio con agua o aceite de oliva hasta que obtenga una consistencia similar a la de la plasta de dientes. Es una alternativa natural que funciona muy bien incluso para eliminar la grasa quemada.
Prueba un «cóctel de limpieza»
Simplemente necesitas mezclar media taza de vinagre con una taza y media de agua y cocinarla a fuego medio durante 5 a 10 minutos en tu sartén antiadherente. Déjalo reposar hasta que se enfríe y después lava la sartén con agua templada, un detergente suave y un paño de micofibra.
Utiliza aceite
Siempre puedes mejorar tus aparatos de cocina con un poco de lubricación.
Con un poco de aceite antes y después de utilizar la sartén antiadherente puedes ayudar a proteger la superficie. Necesitas añadir media cucharada por dosis para que funcione.
Seca adecuadamente
Después de engrasar la sartén, sécala completamente y guárdala de manera segura.
Si estás apilando la sartén antiadherente entre otros utensilios, coloca una toallita limpia o seca (también sirve un paño de cocina o una toalla de papel) entre cada uno. De este modo podrás evitar arañazos y otros daños en la superficie de todas tus herramientas.